Vitaminas contra el frío

13, enero, 2014 / Bienestar / Sin comentarios

Tomar alimentos que refuercen las defensas y aporten energía permite adaptarse mejor al frío y cuidar la salud en estos meses. Hoy profundizamos en las claves de la alimentación invernal. ¡Vamos allá!

Está más que demostrado que los alimentos de temporada, es decir, propios de la estación en que nos encontramos, son altamente beneficiosas para nuestra salud. Ahora estamos en invierno, así que abordamos algunos regalos que nos brinda frío. El invierno nos ofrece alimentos repletos de sabor y colorido. Los productos frescos se unen a los frutos secos para garantizar una dieta sana y equilibrada.

Vitamínicos champiñones
Son una buena fuente de vitaminas B2 y B3 y apenas aportan calorías. Para ser una hortaliza los champiñones poseen una cantidad interesante de proteínas pero aún están lejos de las que tienen las legumbres o los cereales.

Nutritivos cacahuetes
Es el fruto seco que contiene más ácido fólico y vitamina B3 y es muy rico en proteínas por lo que un aporte moderado de cacahuetes es un buen complemento para el embarazo. Sin embargo, son muy calóricos y no conviene abusar de su consumo.

Deliciosa endibia
Como más blanca mejor ya que como más se acerca al verde, más amargo es su sabor. Alta riqueza en ácido fólico y buena cantidad de vitamina B y C, provitamina A y potasio.

Energía de los higos secos
Ricos en fibra, contienen más calcio que ninguna de las otras frutas secas, son una buena fuente de hierro y extraordinariamente ricos en potasio. Son fáciles de digerir y resultan muy nutritivos, pero es cierto que aportan bastantes calorías. Es ideal para deportistas y excursionistas.

Es especialmente importante cuidar de nuestra alimentación en invierno ya que el frío y la reducción de las horas de luz solar invernales se asocian a un ánimo más bajo, que puede causar cambios en la actitud hacia la comida. Conviene tener en cuenta ese hecho para evitar ciertos trastornos.

Los estudios sobre los cambios de ánimo en las diferentes estaciones indican que para el 82% de la población el período que más induce a la tristeza es el invierno. Asimismo se ha observado que en estrecha relación con los cambios psicológicos estacionales pueden presentarse modificaciones en el comportamiento alimentario.

¿Qué otros alimentos te gusta comer en invierno?

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