Cómo aumentar tu esperanza de vida 10 años más
20, marzo, 2012 / Bienestar / Sin comentarios
Vivir más años y hacerlo con una mejor calidad de vida, podría ser posible si llevamos a la práctica un estilo de vida saludable a la mediana edad. Según un estudio publicado en la revista BMJ, seguir una serie de hábitos saludables como no fumar, no sufrir sobrepeso o llevar a cabo ejercicio regularmente, durante la etapa de los 50 años, podría alargar una década nuestra esperanza de vida.
Factores de estilo de vida
Este trabajo analizó datos de 73.196 enfermeras y 38.366 profesionales de la salud de los Estados Unidos quienes fueron evaluados regularmente durante el transcurso de 20 años, registrando diagnósticos y posibles fallecimientos por cáncer, enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2.
Entre los factores de estilo de vida se tuvieron en cuenta el no fumar, tener un peso adecuado, realizar al menos 30 minutos de ejercicio al día, tener un consumo moderado de alcohol y llevar a cabo una dieta saludable.
Se llegó a la conclusión de que la esperanza de vida para las mujeres era de 24 años en aquellas que no adoptaron hábitos saludables. Por su parte, aquellas que sí optaron por cuatro o cinco de los factores de estilo de vida saludable mencionados llegaban a vivir una media de 34 años más.
En el caso de los hombres, la esperanza de vida, libre de enfermedad a los 50 años, era de 24 para aquellos que no adoptaron hábitos de vida saludable y de 31 para aquellos que sí.
Asimismo, se descubrió que los hombres que fumaban 15 o más cigarrillos al día y los sujetos que tenían un índice de masa corporal de 30 o más, eran aquellos que tenían una menor esperanza de vida libre de enfermedad total respecto al resto de individuos estudiados.
Potenciar políticas de salud pública
Tener un estilo de vida saludable, según este estudio, no sólo mejoraría nuestra esperanza de vida sino que podría evitar sufrir importantes patologías como el cáncer, enfermedades cardiovasculares o la diabetes.
Aunque los datos son esperanzadores, los investigadores puntualizan que se trata de un estudio observacional, por lo que no se puede establecer una relación de causa y efecto. De todas formas, los mismos expertos abogan por potenciar políticas de salud pública que mejoren tanto la alimentación como el entorno físico, así como, políticas y regulaciones sobre el consumo de sustancias tóxicas como el tabaco o el alcohol.
*Fuente: El Español