Claves para tener un corazón y una mente sanos
05, agosto, 2013 / Bienestar / Sin comentarios
Estamos saturados de mensajes que nos dicen las palabras vivir sano, mente saludable, y un sin fin de sinónimos. ¿Pero qué significan en realidad y para qué sirven tantos consejos? Pues es muy sencillo: vivir mejor y estar bien.
Hoy vamos a darte algunos consejos sencillos para llevar una vida más cómoda y fácil porque estar bien, en definitiva, es estar sano física y mentalmente.
. Caminar, moverse, correr y movilizar tu cuerpo en general todos los días.
Es bueno hacerlo aunque haga frío o calor. No sólo hace que tus músculos y huesos se mantengan en buen estado, sino que te ayuda a desconectar de tus preocupaciones diarias.
. Intenta evitar aire con abundante humos de coches o tabaco.
Elige mejor aire puro y limpio. La riqueza y estado del aire afecta a nuestra salud en general.
. Seguir una dieta principalmente basada en alimentos vegetales.
Es recomendable que las frutas, las verduras y las hortalizas sean la base de nuestra alimentación. Estos alimentos son ricos en antioxidantes y nutrientes beneficiosos para nuestro organismo y, en consecuencia, nuestro cuerpo nos lo agradecerá.
. Es preferible beber abundantes zumos de fruta fresca y evitar las bebidas alcohólicas.
Necesitamos un mínimo de un litro y medio de agua para hidratarnos bien. Podemos complementarlo también con zumos de fruta fresca o infusiones. Es aconsejable un consumo moderado de bebidas alcohólocas.
. Es importante saber diluir el estrés y las prisas y aprender a atenuar la tensión a través de la relajación.
En estar en paz con uno mismo es esencial para afrontar y fluir en el día a día. Dedicar algo de tiempo a relajarnos y saber desconectar es esencial. El deporte, ya sea activo como correr, nadar o caminar, o pasivo como yoga o tay chi pueden ayudarte a desestresarte.
. Aprovechar todas las oportunidades para disfrutar de la alegría.
Es muy saludable sonreír o reírse a carcajadas. De la misma forma, llorar es sano para eliminar líquidos y penas al mismo tiempo.
La meditación controla el estrés y disminuye los infartos cerebrales y cardíacos. Saber escucharse a uno mismo es una potente fuente de bienestar.