La comida “basura” es adictiva
03, octubre, 2012 / Bienestar / Sin comentarios
El Instituto de Investigación “The Scripps”, en California (Estados Unidos) ha averiguado que muchas de las personas que comen más “comida basura” de la cuenta en realidad tienen una especie de adicción. ¿Quieres saber más?
Al tomar “comida basura”, en el cerebro se activan las mismas zonas que las personas con otro tipo de adicción. Los expertos han descubierto que los alimentos grasos y azucarados provocan los mismos efectos en el cerebro que llevan a la gente a la drogadicción. “Esto muestra la evidencia de que la drogadicción y la obesidad están basadas en los mismos mecanismos neurobiológicos», explica el profesor Paul Kenny
Los expertos realizaron el estudio con ratas alimentadas a base de tarta de queso, bacon y salchichas. Poco después del experimento, los animales comenzaron a engordar y a mostrar signos de adicción, similares a los que sufren algunas personas con la heroína o el tabaco.
Así, la satisfacción que se siente al ingerir “comida basura” puede costar de vencer, pero el primer paso es reconocer el problema. El siguiente paso es proponerse de verdad comer mejor.
Desde hace tiempo se conocen los efectos que la obesidad tiene sobre el organismo, por esto cuando sobran varios quilos conviene marcarse el objetivo de perderlos y ganar salud. Los expertos insisten en que vale la pena intentar adelgazar el peso que sobra y hacerlo con una dieta variada y equilibrada; sobre todo, acorde a las necesidades reales de la persona.
Algunas sencillas pautas saludables son:
. Comer cada 3 o 4 horas: al hacer cinco comidas evitarás el impulso de comer cualquier cosa y en gran cantidad, ya que comer más a menudo no te hace sentir tan hambriento.
. Un bocado de calidad: una pieza de fruta, un bocadillo pequeño, unas galletas integrales y un yogurt son preferibles a “snacks” industriales.
. Hidratarse adecuadamente: bebe líquido suficiente, ya que la hidratación del organismo es muy importante
. Cada día no puede faltar: dos raciones de verdura o ensalada y 25 gramos de frutos secos. Dos raciones de cereales integrales (arroz, avena y centeno) y 2 o 3 piezas de fruta (si es un zumo, con la pulpa para obtener toda la fibra).
Y tú, ¿te has sentido alguna vez adicto a la «comida basura»?