Los descansos al aire libre pueden proteger a los niños de la miopía
25, noviembre, 2013 / Salud Ocular / Sin comentarios
Los recreos al aire libre y una mayor exposición a la luz del sol reducen el riesgo de miopía en niños, según dos nuevos estudios publicados en la revista Ophthalmology.
En el primero de ellos participaron 350 estudiantes de dos escuelas de primaria taiwanesas. De acuerdo con sus resultados, los niños del colegio que obligaba a pasar los recreos al aire libre (lo que equivalía aproximadamente a 80 minutos diarios) tenían menos probabilidades de desarrollar miopía. “Una intervención en la escuela es una manera práctica y directa de atajar la prevalencia creciente de miopía”, afirma el Dr. Pei-Chang Wu, del Kaohsiung Chang Gung Memorial Hospital (Taiwán).
En el otro estudio, que evaluó a 250 escolares daneses, los investigadores concluyeron que una exposición incrementada a la luz del sol disminuye la progresión de la miopía en los más pequeños. “Nuestros resultados indican que la exposición a la luz del sol ayuda a proteger a los niños de la miopía”, indica el Dr. Dongmei Cui, de Sun Yat-sen University (China).
Las conclusiones de estos estudios se pueden aplicar también a la hora de reducir las horas que los niños pasan frente a las múltiples pantallas como televisión, smartphones, videojuegos y ordenadores entre otras. Habitualmente desde su nacimiento manejan estas pantallas con increíble facilidad.
Sin embargo, un reciente artículo publicado en la revista «Archives of Disease in Childhood» y firmado por el psicólogo británio Aric Sigman recomienda que los niños y adolescentes pasen menos horas frente a las pantallas. Las conclusiones de este psicólogo son más contundentes. Recomienda que los niños menores de 3 años no vean televisión, ni se expongan a ningún tipo de pantalla, ya que considera que los tres primeros años de vida son fundamentales para el desarrollo del cerebro. Y critica que muchos padres utilicen la televisión como una «niñera» para mantener a sus hijos controlados.
Y es que nuestros ojos están hechos para mirar de lejos y estar al aire libre favorece una buena salud ocular. Así, que los niños jueguen al exterior previene la miopía ya que obliga a los ojos a no centrarse sólo en la corta distancia, y es una buena forma de romper la rutina diaria de fijar la mirada entre libros y pantallas.